2. LUCHA CONTRA LOS GRUPOS DE AUTODEFENSA La lucha contra las autodefensas ha sido una prioridad del Gobierno Nacional, al igual que contra todos los grupos armados al margen de la ley. Así se estableció en la Política Gubernamental de Promoción, Respeto y Garantía de los Derechos Humanos y de Aplicación del Derecho Internacional Humanitario 1998-2002. Los avances en esa dirección se miden por la gestión de los organismos competentes de la justicia, y por los resultados operacionales obtenidos por la Fuerza Pública en combate. Resultados obtenidos por la administración de Justicia Los resultados obtenidos por la administración de justicia en su acción en contra de miembros de los grupos de autodefensa hacen parte fundamental de la gestión que cumple el Estado en su lucha contra la impunidad. Al respecto debe destacarse la labor de la Fiscalía General de la Nación. Se ha fortalecido la Unidad de Derechos Humanos del órgano acusador, donde se tramitan por lo general las violaciones más graves, o percibidas como más graves por la opinión pública, de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario. Esto ha dado como resultado la vinculación de miembros de los grupos de autodefensa, por su participación en violaciones de los derechos humanos e infracciones al DIH, incluyendo homicidios, masacres y conformación de grupos de justicia privada. Su alta participación se debe entender en relación con los tipos penales que son de competencia de la Unidad. La mayoría de los casos radicados en la Unidad de Derechos Humanos de la Fiscalía lo son por homicidio, seguido de conformación de grupos de autodefensa, secuestro, masacres y amenazas. La gran mayoría de los casos relacionados con la conformación de autodefensas se abrieron en los años de 1996 y 1997, y los de masacres en 1998 y 1999. La actividad de la Unidad concentra las acciones penales contra particulares presuntamente vinculados a grupos de autodefensa. A noviembre 15 de 2000 había 517 medidas de aseguramiento y 311 resoluciones de acusación dictadas contra miembros de los grupos de autodefensa; estaban vigentes 309 ordenes de captura contra miembros de estos grupos. Los detenidos han pasado de 183 en diciembre de 1999 a 243 en la actualidad. En el último año la Unidad de Derechos Humanos de la Fiscalía General de la Nación abrió investigación de más de 15 casos por el delito de conformación de grupos de autodefensa en varias regiones del país. Además de la lista de las referidas investigaciones, y a título ilustrativo, se anexa un listado de algunos de los casos radicados en la Unidad de Derechos Humanos de la Fiscalía, en los cuales, entre los delitos por los que se investiga a los vinculados, se incluyen la conformación o la pertenencia a los grupos de autodefensa. En cuanto a efectividad de las capturas, el INPEC informó que al final del año había 761 miembros de las autodefensas en las cárceles, cifra que significa el 9.3% de sus (8150) integrantes.
COMPARATIVO
DE LABOR JUDICIAL DE LA UNIDAD DE DERECHOS HUMANOS
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OPERACIONES
DE LA FUERZA PÚBLICA CONTRA MIEMBROS
DE LA AUTODEFENSAS
En los casos de acusaciones por nexos de miembros de la fuerza pública con grupos al margen de la ley, el gobierno impulsa las correspondientes investigaciones y busca sancionar a los miembros de las Fuerzas Militares, de Policía, o de los organismos de seguridad que se encuentran vinculados con estos grupos ilegales que por acción u omisión no han reprimido esta forma ilegal e irregular de participación en el conflicto armado. En la actualidad, en las 931 investigaciones en curso asignadas a la Unidad de Derechos Humanos de la Fiscalía, están vinculados 38 miembros del Ejército, 6 de la Armada, 4 del DAS, 2 del CTI y 37 de la Policía Nacional. Son pocos los casos de miembros de la Fuerza Pública vinculados a procesos por el delito de conformación de grupos de autodefensa. A fines de noviembre, sin contar los casos en etapa de juicio en distintas instancias, estaban vinculados a investigaciones en etapa de instructiva en la Unidad de Derechos Humanos de la Fiscalía por el delito de conformación de grupos de autodefensa, 19 miembros del Ejército Nacional, 1 de la Armada y 33 de la Policía Nacional Al examinar en forma muy general las actuaciones de la Fiscalía y sus relaciones con la Fuerza Pública en la lucha contra las autodefensas, se concluye que el mayor peso recae en el Cuerpo Técnico de Investigaciones, CTI, y que las detenciones se producen como resultado de investigaciones judiciales después de ocurridos los hechos. Ello releva la importancia de la actividad de la Fiscalía, a través del CTI, así como del DAS y de la Policía Nacional, para hacer efectivas las órdenes de captura tanto en la lucha contra las autodefensas como en todas las demás tareas relacionadas con la confrontación de los actores de la violencia y de la delincuencia. Resultados operacionales de la Fuerza Pública Las acciones de la Fuerza Pública son fundamentales para apreciar la lucha del Estado colombiano contra las autodefensas. Los resultados operacionales permiten reconocer una mejoría substancial experimentada por la acción de la fuerza pública en su lucha contra los grupos armados al margen de la ley, y específicamente contra las autodefensas. Sumados los esfuerzos de los militares y la Policía, se tiene que entre 1998 y 2000 han sido capturados por la Fuerza Pública un total de 852 miembros de las autodefensas, y 145 han sido dados de baja. De estos, en el 2000 hasta mediados de noviembre fueron capturados 159 miembros de las autodefensas por los militares y 107 por la Policía Nacional, y han sido dados de baja 67 en operaciones militares y 9 en operaciones policiales 6. La Policía ha concentrado su trabajo en hacer efectivas las ordenes de captura. Los resultados operacionales de la Fuerza Pública contra las autodefensas, entre bajas y capturas, han significado para las autodefensas la pérdida del 10.5% de sus (8150) efectivos en el 2000 hasta noviembre, lo cual constituye un indicador de los esfuerzos de la Fuerza Pública para neutralizarlos. Los resultados operacionales de las Fuerzas Militares y de Policía, si bien muestran que las bajas que el Ejército y la Policía ocasionan a la subversión son muy superiores a las que causan a las autodefensas, permiten apreciar una tendencia ascendente en dichos resultados operacionales. Además, si se compara el número de bajas ocasionadas por la Fuerza Pública a las autodefensas en los últimos dos años con el número de bajas ocasionadas a la subversión, se observa en aquellas un aumento del 124%, muy superior al del 15% de éstas. Esto demuestra la intensificación de la lucha contra las autodefensas. En el 2000, hasta noviembre, se presentaron 64 combates entre la Fuerza Publica y las autodefensa. A pesar de lo logrado, si se miran los resultados operativos de la Fuerza Pública en su conjunto, independientes de las actuaciones judiciales, se concluye que es necesario fortalecer las labores de inteligencia para prevenir los hechos, ya que son escasas las confrontaciones directas con estas estructuras al margen de la ley, pues la táctica militar de las autodefensas no es el enfrentamiento directo con las fuerzas militares, sino que recurren sobre todo al amedrentamiento y el asesinato de civiles y funcionarios. Su objetivo militar lo constituye fundamentalmente la población, que consideran auxiliadores de la guerrilla. No obstante, muy recientemente se ha detectado un aumento en las confrontaciones entre autodefensas y guerrillas -se cuentan 12 en diciembre-, pero al mismo tiempo es claro que no está entre sus planes el enfrentamiento directo con las fuerzas militares.
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