"El Gobierno que represento está comprometido en una lucha de largo aliento por conquistar el respeto por los Derechos Humanos, comenzando por el más precioso: el derecho a la vida. Este compromiso se confunde con su empeño por lograr la paz y la reconciliación entre todos los colombianos".

"...siguiendo los lineamientos de la Conferencia de Viena de 1993, el Gobierno está comprometido a concertar internamente y a poner en marcha un plan gubernamental de acción en materia de Derechos Humanos y de Derecho Internacional Humanitario, de carácter integral. La intensificación y degradación crecientes del conflicto armado interno habrán de determinar que en él se prioricen, por lo menos en parte, programas y medidas destinadas a la defensa de los derechos a la vida, la integridad, la libertad y la dignidad. ...Las acciones que se debe abocar son, pues, en múltiples frentes. ...Se trata por ello sobre todo de alcanzar una mayor coordinación y una mayor eficacia y eficiencia en el cumplimiento de aquellas tareas que realizan Derechos Humanos, y de favorecer una mayor y mejor cooperación del Gobierno y del Estado con la sociedad".

" Yo entiendo que parte fundamental de mi deber como funcionario público es propender porque cada colombiano reconozca y acepte que existen unos valores esenciales que son patrimonio de la humanidad y sobre los cuales se tienen que edificar las sociedades democráticas, abiertas, pluralistas y solidarias. Que mi deber es trabajar por la construcción de una ética ciudadana en la cual la tolerancia activa y el respeto a la diferencia sean valores esenciales. Creo que, al hacerlo, comenzaremos a desarmar los espíritus, que es el primer paso para desalentar comportamientos violentos ".

Gustavo Bell Lemus, Vicepresidente de la República, Londres, Abril 26 de 1999.